Colección privada
Roberto Caputo nació en 1967 en Barrafranca, en la provincia de Enna. Comenzó a pintar con solo 10 años, y desde entonces se ha convertido en un artista autodidacta consumado. A lo largo de los años, ha desarrollado y expresado su creatividad al experimentar con una variedad de técnicas y estilos. Sus lienzos narran su tierra natal, Sicilia, con calles estrechas, monumentos y colores cálidos del interior del Mediterráneo. Desde 2005 opera un estudio de arte con un taller adyacente para la restauración de carros sicilianos. Muchas de sus obras pertenecen a colecciones privadas tanto en Italia como en el extranjero.
Las imágenes que adornan las superficies de este frigorífico se originan de las creencias populares sicilianas en la superstición y la mitología. Pintado en el frente está el caballo que tira del carro, adornado con armiggi (arneses tradicionales con espejos), cianciane (campanitas), giummi (pompones) y cintas de colores. En el panel izquierdo está la imagen de la sirena, la hechicera que lleva a los hombres a la ruina al atraerlos hacia lo desconocido. La batalla eterna entre el bien y el mal se reproduce en el lado derecho con la figura del arcángel Miguel derrotando a un demonio. El águila real que aparece en ambos lados simboliza la elevación espiritual y la vida futura. El sol en la parte superior, rodeado de rayos blancos, rojos y amarillos, es un emblema de vigor y renacimiento.
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